En el artículo relativo a la brecha digital entre el mundo rural y urbano, publicado en CONFILEGAL se había adelantado la implementación de políticas europeas y nacionales con el potencial de aumentar la cohesión social y económica así como mejorar la igualdad entre ambas realidades sociales a través de los denominados Territorios Rurales Inteligentes o Smart Villages.
En este sentido, en noviembre del año 2017, el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente constituyó, de manera pionera en la Unión Europea, el Grupo Focal sobre Digitalización y Big Data en el sector agroalimentario y forestal, y el medio rural, tratándose de un grupo multidisciplinar, multisectorial y multiterritorial.
A lo largo de estos meses, este Grupo Focal, formado por 38 expertos, ha trabajado en aspectos como la identificación de las principales barreras que pueden afectar al proceso de transformación digital del sector agroalimentario y forestal, y del territorio rural, los principales actores implicados en este proceso y su papel en el mismo. De igual forma, ha estudiado los distintos incentivos (económicos, legislativos…) necesarios para favorecer el proceso de transformación digital.
En la actualidad, según el diagnóstico llevado a cabo en la Agenda Urbana Española, el 80% de la población de nuestro país se concentra en áreas urbanas, que suponen sólo el 20% del territorio.
A medio camino, están las capitales de provincia de interior o ciudades pequeñas no capitalinas, que están perdiendo población y actividad económica de forma paulatina.
Este hecho sitúa a España entre los países con un mayor porcentaje de población urbana de toda la Unión Europea.
El proceso de despoblación del mundo rural está motivado por factores como el envejecimiento demográfico, el reducido relevo generacional, la baja natalidad y la escasez de medios de vida y puestos de trabajo.
ESTRATEGIA NACIONAL FRENTE AL RETO DEMOGRÁFICO
Ante esta situación, el Consejo de Ministros aprobó en 2019 el acuerdo sobre las directrices generales de la Estrategia Nacional frente al Reto Demográfico, de carácter global y transversal, desde una perspectiva multidisciplinar y con la participación de todos los departamentos a través del trabajo de un grupo interministerial, incorporando una perspectiva demográfica en el análisis de las actuaciones sectoriales.
La Primera Comisión Delegada para el Reto Demográfico, celebrada el pasado mes de febrero en La Rioja bajo la presidencia del Jefe del Ejecutivo, y con la presencia de trece miembros del Gabinete, acordó toda una batería de medidas de diferentes departamentos del Gobierno para luchar contra la despoblación y ofrecer oportunidades de desarrollo en todo el territorio.
Dicha Comisión, refleja la importancia que el Gobierno concede al abordaje del reto demográfico, lo que implica que cualquier ciudadano pueda desarrollar libremente su proyecto de vida personal, familiar y profesional en igualdad de derechos y oportunidades. [1]
Significar en este sentido, que desde el ámbito autonómico, concretamente desde la Junta de Castilla y León, ha implementado el proyecto Territorio Rural Inteligente, cuya plataforma desarrolla Telefónica, cuenta para su implantación con diferentes tecnologías de comunicaciones, entre ellas una que está llamada a revolucionar el sector: se trata de la Narrow Band IoT (NB IoT), una tecnología de comunicación inalámbrica basada en el bajo consumo energético que permite conectar toda clase de dispositivos con un gasto mínimo de batería y una implementación rápida en la red de los operadores.
El NB-IoT es un nuevo estándar de la industria, que está además apoyado por los más importantes operadores a nivel mundial.
Territorio Rural Inteligente ha logrado la instalación del primer sensor NB IoT en entorno rural que se realiza en Europa –según información facilitada por Telefónica- con la implantación de esta tecnología en un sensor de detección de fugas de agua colocado en la localidad palentina de Grijota.
El uso de los sensores permite comprobar en tiempo real el estado de cada servicio público gestionado, lo que facilita una actuación inmediata. Ello proporciona el poder adaptar el funcionamiento del servicio a las condiciones específicas de cada momento, así como el contar con un análisis de la información generada que permitirá apoyar la toma de decisiones que puedan mejorar y optimizar la prestación de dicho servicio.
EN SU PRIMERA FASE
El proyecto Territorio Rural Inteligente se encuentra ahora en la primera fase, en la que se han instalado a modo de prueba un número limitado de sensores y actuadores por control remoto en puntos determinados por la Consejería de Fomento y Medio Ambiente para comprobar su correcto funcionamiento; en la segunda fase, que durará tres años, las Diputaciones instalarán y mantendrán los sensores y actuadores que gestionarán los servicios públicos de alumbrado, agua y recogida de residuos.
En esta primera fase se han instalado un total de 62 sensores, repartidos en las provincias de Segovia, Palencia, Soria, Ávila y León.
De ellos 42 dispositivos proporcionan información sobre residuos, 11 sobre el servicio de aguas y 9 sobre alumbrado.
El proyecto ‘Territorio Rural Inteligente Castilla y León’ se enmarca en la iniciativa ‘Red de Municipios Digitales de Castilla y León’ que ha venido desarrollando la Junta de Castilla y León desde el año 2007, a la que ya se adhirieron las diputaciones y los principales ayuntamientos de la Comunidad, con el objetivo de impulsar en el entorno local los servicios públicos en línea a sus ciudadanos, empresas y organizaciones utilizando las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones.
Con ello se busca impulsar la e-Administración y mejorar la eficacia, eficiencia y calidad de los servicios públicos a través de un uso intensivo de las tecnologías de información y comunicación.
“SMART RURAL”
La plataforma ‘Territorio Rural Inteligente de Castilla y León’ es la primera iniciativa a nivel regional para poner en marcha una plataforma de Smart Rural común para todas las administraciones públicas de Castilla y León. Esto redundará en un mayor ahorro de costes, pero especialmente en la sostenibilidad, reduciendo la huella de carbono y mejorando la eficiencia energética en la gestión de servicios, aumentando la satisfacción del ciudadano e incrementando las oportunidades de negocio para empresas locales.[2]
Por su parte, en el plano comunitario, está suscitándose la necesidad de crear “Territorios Rurales Inteligentes” (Smart Villages) entre los que destaca el proyecto ‘Acción preparatoria sobre zonas rurales inteligentes en el siglo XXI’ (Smart Rural 21).
El meritado proyecto, de dos años y medio, es apoyado por la Comisión Europea (DG AGRI) y tiene como objetivo general la promoción e inspiración de los pueblos a desarrollar e implementar enfoques y estrategias de pueblos inteligentes en toda Europa, tomando conclusiones y apoyando futuras intervenciones políticas sobre pueblos inteligentes.
El proyecto comenzó en diciembre de 2019 y concluirá en junio de 2022.
El proyecto Smart Rural 21 está coordinado por E40 Group en cooperación con cinco socios especializados, IfLS y empirica (Alemania), Innovatiesteunput (Bélgica), Universidad Agrícola de Atenas (Grecia) y eConcepts (Irlanda). También están trabajando con 28 expertos nacionales que cubren todos los países de la Unión Europea.[3]
Para llevar a cabo dichos objetivos se crea la plantilla de estrategia de aldea inteligente como una herramienta para ayudar a las comunidades locales a desarrollar una estrategia de desarrollo local que se adapte al concepto de “aldea inteligente”. La plantilla tiene como objetivo ayudar a crear una visión y un camino de desarrollo para el pueblo a mediano y largo plazo.
Las estrategias de aldea inteligente deben ser, como su propio nombre indica, inteligentes, (específicas, medibles, alcanzables, realistas y con plazos determinados). Sin embargo, el tipo de medidas tomadas, su momento, etc., dependerá mucho del contexto local y, por lo tanto, no están predefinidos. La plantilla de estrategia de aldea inteligente, en definitiva, no está desarrollada para responder a un programa o flujo de financiamiento específico.
La plantilla de estrategia consta de:
Componentes estándar de la estrategia de desarrollo local, como
- Descripción de los activos y oportunidades de la aldea, así como de los desafíos y necesidades y un análisis FODA;
- Una lógica de intervención clara que incluye una jerarquía de objetivos para responder al FODA, acciones clave para lograr los objetivos, productos y resultados esperados;
- Planificación de recursos financieros y humanos;
- Especificación de la capacidad necesaria para los procedimientos de implementación, gestión y seguimiento.
Componentes que reflejan los principios básicos del concepto de ‘aldea inteligente’:
- Participación de las partes interesadas: secciones para describir los métodos de participación de la comunidad local en todas las etapas, desde la evaluación de necesidades, pasando por el desarrollo de estrategias, hasta la planificación de acciones;
- Vínculos con estrategias locales existentes: secciones para describir cómo la estrategia se basa en estrategias existentes y funciona a nivel local, para evitar la duplicación de esfuerzos.
- Enlaces a programas / estrategias a nivel administrativo superior: secciones para describir cómo la estrategia contribuye a los objetivos de las estrategias y programas de nivel superior (microrregional / GAL, regional, nacional). Esto puede garantizar que la estrategia no se desarrolle de manera aislada y podría contribuir a identificar fuentes de financiamiento relevantes más adelante.
- Soluciones inteligentes: se recomienda que las soluciones propuestas incluyan una serie de elementos innovadores (innovaciones digitales, sociales, tecnológicas u otras) que puedan ayudar al pueblo a superar sus desafíos de una manera ‘no tradicional’.
¿Cómo funciona?
- La plantilla de estrategia consta de una estructura predefinida (lógica): capítulos, secciones y subsecciones que deben completar los líderes de la aldea.
- Cada sección contiene una serie de preguntas indicativas que pueden ayudar a desarrollar los contenidos de la sección correspondiente.
- Se recomienda encarecidamente que consulte con regularidad a las partes interesadas locales en las diferentes etapas del desarrollo de la estrategia para garantizar la propiedad y la implementación efectiva más adelante. Vea más herramientas específicas sobre cómo lograr la propiedad de la comunidad.
¿Para quién?
- La plantilla de estrategia es esencialmente para los líderes de la aldea (por ejemplo, alcaldes y su equipo, asesores de la aldea, asociaciones de la aldea, juntas municipales o grupos de interesados locales) que deseen desarrollar el marco básico (‘esqueleto’) de una visión / estrategia de su aldea.
- Las partes interesadas de la comunidad local deben participar tanto como sea posible en todas las etapas del proceso (por ejemplo, evaluar las necesidades, discutir varias versiones del documento, planificar los objetivos, las acciones que podrían tomarse, etc.).[4]
Como resumen, hacemos votos por esta articulación de marcos normativos, con estructuras y estrategias definidas, coordinación, apoyo unánime y constante entre los distintos actores sociales y todo ello en aras de la utilidad pública e interés social al que todos nos debemos y en este caso focalizado hacia los Territorios Rurales Inteligentes o Smart Villages, como forma de prevenir la significativa brecha digital entre el mundo rural y el urbano.
[3] https://www.smartrural21.eu/about/
[4] https://www.smartrural21.eu/roadmap-toolbox/smart-village-strategy-template/
Fuente: confilegal.com