Según el Consejo General de la Psicología de España, una de cada dos personas por encima de los 60 años está en riesgo de aislamiento social y una de cada tres afirma sentirse sola de manera frecuente. La soledad no deseada es un problema social cada vez más común, que va a seguir afectando a cada vez más personas y que tiene consecuencias en la salud física y mental de las personas que la sufren.
Mientras que una vida socialmente activa es un factor de protección de la salud, sentir soledad no deseada tiene un impacto negativo en la salud física y psicológica:
- Supone un mayor riesgo de padecer enfermedades crónicas como enfermedades cardíacas, diabetes o cáncer;
- Acelera el deterioro cognitivo y es un factor de riesgo en la enfermedad de Alzheimer;
- Puede aumentar el riesgo de depresión, ansiedad y otros trastornos emocionales.
- Y, en general, se asocia a un deterioro en la calidad de vida y al riesgo de mortalidad prematura.
Todos estos efectos son especialmente graves en el grupo de las personas mayores, por ello el Colectivo para el Desarrollo Rural Tierra de Campos trabaja a favor de que las personas mayores no sufran soledad no deseada mediante la realización de un servicio de acompañamiento en el territorio de Castilla y León.